Colombia crecerá más del 3% en un complejo entorno

Colombia se destacó en 2019 por su desempeño en términos de crecimiento económico, en un escenario global poco favorable, producto de la guerra comercial y el interminable Brexit, por mencionar solo algunos factores. En particular, el PIB de Colombia crecerá este año a una tasa real cercana al

3,2% que, si bien no es espectacular, representa una aceleración respecto a lo observado en 2018 (2,6%), algo que ningún otro país latinoamericano conseguirá. De hecho, 2019 fue un año enmarcado por recortes consistentes en las proyecciones de crecimiento económico en una gran proporción de países, desarrollados y emergentes por igual. Este no fue el caso de Colombia, pues, según la encuesta que hace trimestralmente el Banco de la República a los analistas del sector financiero, la proyección promedio de crecimiento del PIB para 2019 era de 3,2% en diciembre del año pasado, mismo nivel que el consenso publicado este octubre. Sin entrar a discutir las causas, todo lo anterior da, al menos, una señal de resiliencia de la economía colombiana. Según esa misma encuesta de octubre de 2019, para el 2020 ese consenso de analistas proyecta una expansión de la economía nacional de, otra vez, 3,2%. Precisamente lo importante a discutir ahora es el desempeño esperado de la economía colombiana el próximo año. Usualmente, en un pronóstico de una variable macroeconómica como el crecimiento del PIB, no se especifica el grado de incertidumbre que hay en él, como si en otros ejercicios de proyección como las encuestas sobre contiendas electorales (a través del margen de error). El grado de incertidumbre en una proyección económica se podría capturar, al menos parcialmente, observando la diferencia entre el pronóstico más alto y el más bajo de los expertos encuestados. Según la última encuesta del Banco de la República, la proyección más alta de crecimiento del PIB de Colombia para 2020 es de 3,5%, mientras que la más baja es de 2,5%. Ese rango es significativamente más amplio que el que se observó en la encuesta de finales de 2018 para el pronóstico de crecimiento de 2019, pues los extremos eran 3,4% y 3,0%. Ese es precisamente el primer mensaje de esta columna, tendremos un 2020 más incierto que 2019, al menos en materia de crecimiento económico. Dicha incertidumbre se origina, principalmente, en el contexto internacional. En rasgos generales, los desacuerdos entre Estados Unidos y China, que van más allá del frente comercial, parecen estar lejos de solucionarse estructuralmente, en un contexto de elecciones presidenciales en el país norteamericano. Además, el vecindario no anda bien y la situación de algunos países parece seguir deteriorándose. Entonces, en

2020 dependeremos principalmente, y este es el segundo mensaje, de la fortaleza de nuestra demanda interna, particularmente la inversión privada y el consumo de los hogares. En este sentido, parece que las condiciones están dadas para que sea un año relativamente favorable, pues el buen flujo de remesas, las bajas tasas de interés, la migración (que no sólo genera costos), entre otros factores, impulsarán el consumo privado, mientras que la inversión seguiría respaldada por la menor carga tributaria de las compañías y la ejecución de los proyectos 4G. Así, es posible que el crecimiento económico de Colombia se destaque nuevamente en 2020, al menos en la región.

* Las opiniones expresadas son de exclusiva responsabilidad del autor y no reflejan necesariamente los puntos de vista de la compañía.

En 2020 dependeremos principalmente, y este es el segundo mensaje, de la fortaleza de nuestra demanda interna, particularmente la inversión privada y el consumo de los hogares”.